La verdad que fue por un error el que yo acabase con una reflesss. Hace dos años por estas fechas dije en casa «me vendría bien una cámara buena, me apatece empezar a hacer fotos…» y mis padres, en vez de regalarme una digital compacta o una semi-refless que son más manejables, decidieron regalarme la reflesss… y claro, ya sabeis eso que dice: » a caballo regalado…»
Y nada, ahí voy yo con mi reflesss por el mundo. País que visito, país al que me la llevo; aunque luego da un poco de pereza ir cargada con ella cuando haces turismo, lo cierto es que las fotos quedan chulas. Al menos a mí me gustan.
Pues nada, mi reflesss se ha paseado por Paris y mucho, en un año de estancia allí dio tiempo a muchos paseos. La última vez en mi viaje-express con Viky, que fue la que me hizo esta foto:
Pero me ha acompañado a Londres… … Nueva York…
… Venecia, dónde no pude evitar fotografiar el puente de los suspiros «inundado» por esta acción de marketing con la que para nada estoy de acuerdo. Vaya forma de estropear un lugar tan bonito…
… y Ginebra, dónde repetiremos a partir de Febrero!!