Las posibilidades que el 2.0 brinda son inmensas y sólo somos conscientes de un número reducido de ellas. Cada empresa cada negocio es distinto, ya no solo en cuanto a su actividad, sino también en cuanto a sus recursos y capacidades. Todas las empresas, sean pequeñas, medianas o grandes, pueden y deben hacer un esfuerzo por conocer con que recursos y capacidades cuentan. Puede que su ventaja competitiva esté en el offline desarrollando una buena campaña de marketing directo; mientras otra encuentra un modelo de negocio en twitter como un foro de preguntas y respuestas entre sus consumidores.
Para qué tener twitter si no participo en el diálogo, para qué tener un blog si no contesto a los comentarios… Lo primordial es la adaptacion al entorno, pero no adaptarse como lo hace la empresa vecina o nuestro principal competidor.
Ser 2.0 no es una fórmula secreta para el éxito, ni tampoco hay un manual qué seguir paso por paso. Simplemente participa, escucha, comunica y comparte.